Al menos 20 hechos violentos en el contexto de las llamadas “reivindicaciones indígenas” han ocurrido al sur del país en lo que va de año. Hay cuatro regiones comprometidas: La Araucanía, Biobío, Los Ríos y Los Lagos. «Esto es un germen que está creciendo. Hoy día lo que vemos en nuestras ciudades del país es la copia exacta de lo que llevamos viviendo por 22 o 23 años aquí en La Araucanía», advierte Ruth Hurtado, presidenta de la organización Mujeres por La Araucanía.
La prueba de sus dichos llegó este fin de semana con un video que el grupo compartió a través de sus redes sociales. Las imágenes transcurren durante la presentación del libro “Chem Ka Rakiduam. Pensamiento y acción de la CAM”, donde se ve al vocero de la Coordinadora Arauco-Malleco Héctor Llaitul y el ex combatiente del MIR Jaime Castillo Petruzzi, quien estuvo preso durante 23 años en Perú acusado de terrorismo por su participación en el Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA).
Las palabras de Castillo Petruzzi causaron alarma. «No va a haber una solución posible, si es que no hacemos colapsar la columna vertebral de la defensa del Estado, que son las fuerzas armadas, la policía», subraya el ex mirista al referirse a las acciones a tomar tras el estallido social del 18 de octubre.
ATENCIÓN, URGENTE:
Este video muestra el vínculo entre terroristas de la CAM y terroristas del MIR. Aquí el terrorista que está junto a Llaitul, se llama Jaime Castillo Petruzzi, (ex?) militante del MIR y de la organización terrorista Movimiento Revolucionario Túpac Amaru de Perú pic.twitter.com/CEVfGA5rA7— Mujeres Araucanía (@mujeraraucania) February 15, 2020
«El único espacio que existe acá es para la lucha concreta en la calle, o en el campo, o la montaña, como se hace en el sur de Chile, en el Wallmapu. Es la única forma de lograr realmente organizarnos este año que se nos viene. Por eso es importante este libro, porque nos refleja acciones concretas donde un puñado de combatientes son capaces de ir al corazón del enemigo en la industria maderera forestal, extractiva, depredadora, aniquiladora de nuestra naturaleza y causarles un daño en profundidad y después difundir eso», asevera Castillo Petruzzi.
El 16 de enero se hizo un relanzamiento del libro en donde Llaitul relaciona «la lucha» que la CAM ha llevado a cabo con los actuales hechos de violencia en todo el país. «Fuimos a un encuentro en Lo Hermida, en Peñalolén a conversar con pobladores que están en la primera línea de la resistencia (…) y las luchas que están desarrollando hoy en día están marcando también un camino (…). Nos estamos juntando en las ideas y es muy significativo porque es lo que buscábamos en definitiva».
Las víctimas de la violencia rural alertan que lo que ocurre al sur se comienza a replicar en otras ciudades. «Nosotros creemos que La Araucanía fue el laboratorio y hoy se está poniendo el plan en el resto del país. Los niveles de violencia que se han visto en Santiago llaman tremendamente la atención. La falta de respeto hacia la autoridad, hacia Carabineros, que era la institución más respetada del país hasta el mes de octubre”, subraya el presidente de la Asociación de Víctimas de Violencia Rural (Avvru), Alejo Apraiz.
Con ellos coincide René Muñoz, gerente de la Asociación de Contratistas Forestales (Acoforag), para quien la “violencia sin control que hay en la zona sur está avanzando”. Muñoz detalla que en las cuatro regiones del país que están comprometidas por este tipo de sucesos hay 34 comunas afectadas. “Más o menos el 30% de todas las comunas de la zona sur del país. Eso ha tenido un avance paulatino, desde el año 2014 que fueron cinco comunas al año 2020 que tenemos 34 comunas, ha saltado seis veces”, señala el representante de Acoforag.
Castillo Petruzzi regresó al país el 15 de enero de 2016 después de cumplir una condena de 23 años en Perú. El objetivo de su lucha, según dijo en una entrevista era alcanzar el socialismo y el comunismo. Para lo cual la legalidad del método no era relevante. En 1991 se instaló en Lima para hacerse cargo de la planificación y estrategias de la unidad del MRTA que se encargaba de los secuestros y los atentados.
De acuerdo con el relato que dio a La Tercera cuando regresó al país, en dos de esas ocasiones los secuestrados fueron asesinados.
«Tanto el MIR como el MRTA no tenían como política incluir a la población civil en sus políticas de resistencia. Hemos sido educados en el respeto de las leyes de la guerra. Te hablo de fuerzas militares. En el caso de los retenidos por cuestiones económicas probablemente no tienen la misma opinión. No fueron torturados físicamente, pero sí sometidos a un alto estrés psicológico (…) Para nosotros es una acción de justicia, de reparación a nuestro pueblo, y para otros es un crimen que no tiene nombre”, se justificó entonces.
Desde agosto de 2019, Castillo Petruzzi participa de la promoción del libro de la CAM, organización que se ha adjudicado múltiples atentados que han tenido lugar este año en en el sur, después de que su líder, Héctor Llaitul llamara a ir en contra de las forestales. “A ellos tenemos que afectarles sus economías, sus inversiones”, para lo cual convocó a organizar y crear más ORT u organizaciones de recuperación territorial.
En las actividades de promoción, Castillo Petruzzi ha celebrado el actuar de las ORT: “Es efectivamente una guerra de guerrillas, de desgaste, sabotaje político-militar. La acción de milicianos, de comandos son, diría, los embriones de lo que tiene que ser en algún momento un poder superior que enfrente a las fuerzas de ocupación del Estado chileno”. Luego agrega en su discurso: “Mientras más avance la lucha del pueblo chileno en las ciudades y los campos, más va a poder avanzar también la lucha del hermano pueblo mapuche. Mientras más avance la lucha del pueblo mapuche más vamos a avanzar nosotros”.
Jueves 16 de enero 18h00 Presentación del libro CHEM KA RAKIDUAM con Héctor Llaitul, vocero de la CAM; Jaime Castillo Petruzzi, ex MIR-ex preso político Perú;
Víctor de la Fuente, director Le Monde Diplomatique Chile
y Carolina Trejo Vidal, periodista y corresponsal Sputnik News pic.twitter.com/o34uR69NR3— Le Monde Diplomatique Chile (@LMDiplo_Chile) January 13, 2020
En un texto que escribió para la edición chilena de Le Monde Diplomatique, publicado el 1 de octubre de 2019, para reseñar el libro, Castillo Petruzzi apuntó: “Uno de los aportes del libro es adentramos en el concepto de descolonización ideológica, desarrollando tres dimensiones: a saber, independencia organizativa y política, autoafirmación de la identidad mapuche y autonomía del pensamiento mapuche. Definiéndose como una organización antisistémica donde se reivindican en profundidad la cosmovisión mapuche entendida en el marco del anticapitalismo, anticolonialismo, antioligarquía y antiimperialismo, es decir transformándose en una propuesta anticapitalista indianista y revolucionaria. Plantean que la autonomía se conquista luchando y no haciendo concesiones ni negociaciones dentro del marco participativo de elecciones y procesos políticos wigka”.
Advertencias desde el sur
Para Ruth Hurtado, presidenta de Mujeres por La Araucanía, lo que sucede en el sur se ha «invisibilizado» y ahora se ve en el país el mismo tipo de violencia que en esa región se ha experimentado por más de 20 años. “Todos los hechos de violencia están relacionados”, asegura.
El Barómetro de Conflictos con connotación indígena que elabora la Multigremial de La Araucanía, develó que los últimos meses de 2019 fueron relativamente tranquilos en la macrozona sur. Según el análisis, de hecho, el estallido social no incidió en los niveles de violencia. Desde la Multigremial explicaron que en La Araucanía en el primer semestre 2019 hubo un incremento de 107% en las denuncias -después de la muerte de Camilo Catrillanca-. Sin embargo, hubo una baja de acciones en el segundo semestre (30 denuncias) que equiparó casi completamente el número de denuncias anuales a las del año 2018 (321-311 respectivamente).
Organización criminal CAM comete atentado #terrorista, destruyendo
07 retroexcavadoras
01 bulldozer
01 camion cargado
03 camionetas
01 camión grúa pic.twitter.com/xAgnnuROru— Mujeres Araucanía (@mujeraraucania) January 8, 2020
En 2020 hubo un rebrote, y en muchos de los atentados incendiarios han aparecido lienzos reivindicativos de la CAM. Además, la Sociedad de Fomento Agrícola (Sofo) denunció que los agricultores de La Araucanía están sufriendo extorsiones, robos y amenazas por parte de comunidades indígenas, al inicio de esta nueva temporada de cosecha.
El 9 de enero desde la Intendencia de La Araucanía se anunció una denuncia por Ley de Seguridad Interior del Estado en contra del líder de la CAM, Héctor Llaitul, tras amenazar con nuevas acciones.
No obstante, en la región no están muy esperanzados con los resultados de esta indagatoria. “Esa denuncia busca ver si hay antecedentes que pudieran inculpar a este caballero. El gobierno no ha sido capaz de ponerse los pantalones y definitivamente presentar una querella contra él. Si la Fiscalía determina que no hay antecedentes, que es lo más probable, con el mal trabajo que ha hecho durante todos estos años, entonces Llaitul va a seguir haciendo lo que está haciendo: llamando a la sublevación, la anarquía, la violencia, sin que exista de parte del gobierno una respuesta real, concreta, en función de que este caballero tiene que estar en la cárcel, porque él es el vocero de la CAM, es quien ha promovido todos estos hechos violentos”, subraya Muñoz.
Héctor Llaitul, líder de organización criminal #terrorista CAM, responsable directo de todos los atentados ocurridos estos días, él hizo llamado público a la violencia. Debe responder ante la justicia@GobiernodeChile @min_interior @FISCALIA_IX @PJudicialChile @pdi @Carabdechile pic.twitter.com/9oJ56nXpXr
— Mujeres Araucanía (@mujeraraucania) January 18, 2020
Para Apraiz, “La Araucanía por mucho tiempo ha sido invisible, y seguirá siendo invisible si es que la Fiscalía y las investigaciones no tienen resultados”.
El representante de Acoforag hace un llamado al Ministerio del Interior para que “se interiorice de lo que le pasa a los contratistas, los agricultores, los trabajadores, a los familiares de esos trabajadores, que todos los días van al bosque no sabiendo si van a volver heridos por un disparo, eso es inconcebible».
Hurtado señala que hay que ir más allá e incluso investigar quién financia los atentados terroristas en la zona. “Esperamos que esta investigación no termine como Huracán, porque Huracán tenía muchas aristas que sí eran verídicas, pero se ensució con la preparación de pruebas y quedó en nada. Es bueno que las policías trabajen de manera ordenada, organizada, coordinada con lo que el Ministerio Público les indica, pero necesitamos que apuren el trabajo”.
Trabajo constituyente
Desde el Consejo Político Mapuche de Chile Vamos no creen que el repunte de hechos violentos en La Araucanía tenga a una conexión con el proceso constituyente, “son hechos que obedecen a otro tipo de demandas y reivindicaciones, que tratan de visibilizar la problemática indígena, obviamente no de la mejor forma”, dice Hans Curamil, vocero del Consejo, quien también indica que el repunte de la violencia no ha afectado el trabajo político que han hecho en la zona de cara al plebiscito del 26 de abril.
“Vemos el proceso constituyente, con mucho sigilo, puesto que sabemos que con una nueva Constitución no se solucionarán los problemas de la ciudadanía como si fuera una fórmula mágica, pero de producirse, queremos estar ahí, aportando desde el Kume Mogen (el buen saber) y por supuesto plasmando la riqueza que tiene nuestro país en cuanto a la diversidad de pueblos existentes. Como Consejo Político Mapuche tampoco nos perdemos, seguimos insistiendo a nuestros congresistas y al Gobierno en la importancia de concretar el reconocimiento constitucional de los pueblos indígenas, esa es una de nuestras prioridades hoy y no paramos de trabajar en ello”, afirma Curamil.