Piñera y la Revolución

Piñera y la Revolución
Las primeras
protestas a propósito del alza del pasaje del Metro no habrían trascendido si
no hubiese sido porque encontraron un terreno fértil en la sociedad chilena que
vio llegado el momento de hacer presente su malestar. Muchas cuitas surgieron,
algunas imaginarias y otras muy reales.
Piñera como Chivo Expiatorio
El chivo expiatorio del malestar chileno pasó a ser el Gobierno de Piñera que
recién cumple 18 meses en el cargo. De los 30 años transcurridos bajo la
Democracia 24 han estado a cargo de la coalición de Centro Izquierda y el resto
en los cuatro años a cargo del primer Gobierno de Piñera y en el año y medio a
cargo de su Gobierno actual. Es claro entonces que las cuitas ciudadanas han
sido formuladas y presentadas principalmente a causa de condiciones creadas por
los Gobiernos de la Centro Izquierda y en las que poco tuvo que ver Piñera.
¡Son muchos votantes de los gobiernos de la Centro Izquierda los que hoy
denuncian situaciones creadas en democracia por los gobiernos que ellos
ayudaron a elegir!
Cargarle la mano a Piñera será una manera de exculpar a políticos del Centro
o de la Izquierda?
Claramente las acusaciones a Piñera por los males de la sociedad chilena yerran
el conejo. ¿Por qué los acusadores no hurguetean los dos gobiernos de la
Bachelet, el de Lagos, el de Frei y el de Aylwin?
Las acusaciones contra Piñera que prescinden de la historia de los últimos
treinta años de la historia de Chile, han encontrado eco en el exterior donde
la izquierda dogmática afín aún a la vieja fórmula comunista soviética, las ha
amplificado y ha identificado a Piñera como un ser en el cual se puede encarnar
toda la maldad humana. Asi apareció entre muchos otros documentos, un
vídeo de Roger Waters vocalista de Pink Floyd bajo
el título “DEJE DE MATAR A LOS NIÑOS SEÑOR PIÑERA”. Curioso, porque
en el 2017 Piñera y Waters se abrazaban en Santiago.
Las cuitas de los chilenos serán analizadas en próximas columnas de este
Blog. Mientras tanto algunos pecados imperdonables cometidos por Piñera en su
actual Gobierno.
Piñera y Maduro
Nada ha dicho Piñera sobre su rol como protagonista en la trama urdida por
Estados Unidos contra el Gobierno de Venezuela encabezado por Maduro. Ella
incluyó la presencia de Piñera en Cúcuta Colombia para provocar un estallido de
los venezolanos que al fin de cuentas no existió. Apoyó Piñera activamente a
Guaidó el llamado Presidente Encargado de Venezuela quien nombró incluso un
Embajador en Chile en reemplazo del Embajador de Maduro.
Culminó la campaña de Piñera contra Venezuela con las declaraciones
de Ribera el Ministro de RREE de Chile, quien
en entrevista
del Financial Times del 15 de Octubre (tres
dìas antes del ataque al Metro) le anunció a Maduro un bloqueo marítimo, aéreo
y comunicacional si no dejaba el Gobierno y realizaba elecciones para elegir su
reemplazante. ¡Una verdadera declaración de guerra!
Como respuesta de Maduro a tanta hostilidad de Piñera no habría sido raro que
sus acólitos destruyeran las Estaciones del Metro de Santiago: un
desquite por la grosera intervención chilena en los asuntos internos
venezolanos. La felicidad y euforia
de Maduro y del líder chavista Diosdado
Cabello fue evidente e ignorada por el Gobierno de Piñera.
Piñera manejó con evidente descriterio las relaciones con Venezuela, actuando
como perro amaestrado de los EEUU, el país que orquestó la campaña contra
Maduro y que inventó fórmulas tan ridículas como la del Presidente
Encargado.¿Qué llevó a Piñera a ser más papista que el Papa? Viejas relaciones
con Estados Unidos? Algún “negocio colateral”? ¿Habrá creído Piñera
que la insolencia internacional es gratis?
Piñera asoció a Chile con Estados Unidos, una potencia que hasta hoy observa
impávida la agresión a Chile, uno de sus socios. Cómo para no olvidar la
verdad que “el hilo se corta por lo más delgado”. Triste
destino el de países “quiltrientos” que creen poder jugar con las
grandes potencias. Y que el mundo tome nota de lo que puede esperar a los aliados
de Estados Unidos: son simple peones que van al sacrificio en el juego de las
grandes potencias. Mensaje para polacos y rumanos que hoy celebran los misiles
que instala en sus territorios Estados Unidos para atacar a Rusia. ¿Qué les
pasará cuando Rusia les cobre la cuenta por las amenazas que ellos
toleraron?
La Guerra que no Fue
El atentado al Metro de Santiago no fue un atentado más. En un acto de rara
lucidez Piñera declaró después que se produjera, que Chile estaba en
guerra. Las que corresponde llamar “acciones militares” contra
las estaciones del Metro fueron casi simultáneas el Viernes 18 de Octubre
después de las 22.00. Destruyeron 7 estaciones, quemaron 25 y dañaron
118. Solo 18 de las 136 estaciones quedaron indemnes. Fue un ataque que dio la
tónica para la violencia que debía acompañar a las protestas
Pero en una voltereta de payaso Piñera se olvidó de la guerra y su gobierno
puso un manto de amnesia a la población chilena que así dejó de ver el
bombardeo del Metro, se olvidó de la guerra y consideró llegado el momento de
hacer presente sus propias cuitas.
Piñera y la Purga
Hay más con Piñera. Fue él quien dirigió acompañado de su Ministro de Defensa
Espina, la purga en los altos mandos de las FFAA como aprendices del brujo
Stalin que en 1937 purgó hasta lo indecible al Ejército Rojo. Así la
dupla Piñera-Espina pasó a retiro en los últimos doce meses a 21 de los 37
Generales profesionales del Ejército y a 11 de los Almirantes de la Armada. La
razón en el Ejército: un aparente abuso en la compra de pasajes internacionales
en circunstancias que muchos de esos altos oficiales se sujetaron a las normas
establecidas por su Institución para este propósito. Que los oficiales no
hayan podido defenderse y que no han tenido justicia, no tuvo importancia para
el Gobierno. Están siendo juzgados de acuerdo a la vieja justicia penal donde
el juez que procesa es al mismo tiempo el fiscal que investiga y donde el
secreto del sumario se mantendrá hasta que la jueza Rutheford se digne cerrar
el proceso. Pasará mucha agua bajo los puentes antes que la ciudadanía conozca
la verdad (mentira en muchos casos) de las acusaciones a los Generales.
Para un hombre como Piñera educado en el economicismo norteamericano, no es
raro considerar a las FFAA solo como una cuenta del presupuesto. Que ellas son
fundamentales para la República no pareció importarle mayormente.
Piñera y la Inteligencia
Es claro que Piñera nunca le dio importancia a la ANI (Agencia Nacional de
Inteligencia). Solo con el polvo de la derrota y de las destrucciones masivas,
Piñera se enteró que la Inteligencia del Gobierno no es chacota y que ella debe
estar dirigida por una persona sobresaliente. Solo después de un mes de ataques
incesantes al país Piñera le encargó la Inteligencia a un profesional del tema.
Los Agravantes
Piñera no solo traicionó su juramento de guardar y hacer guardar la
Constitución. Varios hechos agravan su falta:
1) Su responsabilidad en la purga que desarticulo los altos mandos de las FFAA
y que las debilitó para enfrentar las amenazas externas e internas a la
Nación.
2) El inexplicable manejo de las Relaciones con Estados Unidos y
Venezuela. En el caso de este último país, Piñera abusó de sus atribuciones al
llevar a Chile prácticamente a una guerra con Venezuela.
3) El notable abandono de sus deberes en relación a la Inteligencia que todo
Gobierno debe manejar respecto a las amenazas externas e internas.
4) Ignorar el ataque al Metro de Santiago como una acción de guerra en contra
de Chile y no tomar inmediatamente las medidas militares que él exigía.
¿Piñera Presidente?
¿Será Sebastián Piñera la persona adecuada para dirigir a Chile en medio de las
complejas circunstancias que debe sortear el país? Un hombre que
manifiestamente ha medido mal el alcance de sus políticas y de muchas de sus
acciones, y que con asombrosa frivolidad traicionó junto a políticos de
todos los colores el juramento fundamental de la República.
Publicado por José Luis Ibáñez