POLÍTICA Y GOBIERNO:

POLÍTICA Y GOBIERNO:
*El Mal Menor: la Trampa Contra el Bien Mayor.*

Por Cristián Labbé Galilea
La Sociedad Occidental vive momentos especiales. Las diferentes religiones conmemoran con variados ritos y formalidades los fundamentos de su Fe, lo que debiera generar un ambiente propicio para el recogimiento, especialmente en un país donde la mayoría de los ciudadanos dice profesar algún credo. Sin embargo, la realidad nos muestra que Semana Santa es vista más como un feriado que como una oportunidad de reflexión.
No crea, mi bienaventurado contertulio, que esta pluma ha decidido evangelizar con estas líneas. Muy por el contrario, lo que busca es alertar sobre lo importante que es reflexionar, en momentos donde los valores de nuestra identidad nacional y el rumbo de progreso que tuvimos en el pasado parecen haberse perdido definitivamente. De allí, entonces, que una reflexión simple y realista nos debiera ayudar a entender mejor el momento que vivimos y los desafíos que enfrentamos, para así activar a quienes se han guarnecido en sus zonas de confort.
Vivimos tiempos en que el malestar social se siente en las calles, en las redes, en toda conversación; la gente está cansada de los mismos discursos, de las mismas promesas, de los mismos rostros. Y sin embargo, a pesar de ese hartazgo colectivo, muchos siguen instalados en una cómoda pasividad… “El cambio no nace del confort, sino del coraje de incomodar lo establecido”.
Cuando en nuestra situación política todos dicen que “el cambio” es lo que se necesita para restablecer el orden, la seguridad, la justicia, la probidad, el crecimiento, entre muchos otros factores… en un segmento importante de intelectuales, analistas, y de los acomodados de siempre, vuelve a aparecer “la tesis del mal menor”. ¡Qué horror… otra vez lo mismo!
Estamos frente a un año de elecciones difíciles: partidos desgastados, políticos desprestigiados, una corruptela desatada, candidatos poco consecuentes. A pesar de ello, se instala la creencia de que no queda otra opción, sólo el mal menor, alguien que no es garantía de consecuencia… Si para algunos ese camino puede sonar lógico y práctico, ténganlo claro, no es más que “un cazabobos” demasiado peligroso.
Teniendo a la vista una alianza, “inicialmente” parlamentaria (subrayo inicialmente), de partidos que profesan explícitamente los principios de la Sociedad Libre (Libertarios, Republicanos y Socialcristianos), surge una esperanza para derrotar “el mal menor”, donde están todos aquellos que por comodidad, prejuicios o cobardía… desprecian lo posible y buscan dejar fuera de juego las otras opciones. Si otra vez votamos con miedo, nos resignamos a un futuro peor en todo al que el país se merece.
Por último, esta pluma aventura en estos días una reflexión a sus leales contertulios: “El cambio no nace de la resignación, sino del coraje de soñar con algo mejor”; debemos luchar con firmeza por los valores que creemos y profesamos, no importa cuán difícil sea el camino. El futuro se construye con decisión y valentía. No debemos caer en “la trampa del mal menor” sino que luchar con esperanza por “el bien mayor”.
Algo que hoy pocos recuerdan…
Post
Conversación
MEMORIA…DE LA BUENA. ÉSTO ES LO QUE SE DEBE ENSEÑAR EN LOS COLEGIOS
Cita
Leo Gonure @GonureL
16 abr.
Patricio Aylwin narra la verdadera historia: “El golpe de estado fue una situación inevitable y forzada por el gobierno del presidente Allende que conducía el país hacia una dictadura comunista”. Fin, punto, nada más que decir.
https://x.com/Nubiavivancoi/status/1912692276603629994
¿Sabes el significado de pituto?
Por José Carlos Meza
Ocho años de tramitación para un proyecto claro y simple, prohibir los pitutos en el Estado y terminar con la eterna práctica de acomodar a familiares y amigos en la política. ¿Qué ocurrió? Lo que lamentablemente muchos sospechábamos, el congreso rechazó la Ley Antipitutos, presentada por José Antonio Kast y el Partido Republicano. Y, ojo, no fue solo el oficialismo quien se opuso, sino también varios parlamentarios de Chile Vamos que prefirieron omitir a favor de la “pitutocracia” antes que apoyar un cambio de verdad.
Esta no es una derrota para un partido político o sector, es una derrota para la ciudadanía honesta, esa que exige igualdad de condiciones. Esto es el reflejo de un sistema que sigue funcionando a base de favores, y que a pesar del discurso que es muchas veces distinto a lo que hacen, siguen fortaleciendo nuevas redes internas y conveniencias personales, y lo más alarmante, es que se hace a vista de todos, sin el más mínimo intento de ocultarlo.
Para entender la magnitud de este portazo les voy a dar un ejemplo, mientras la gente exige que el Estado se ocupe de la delincuencia y el caos migratorio, algunos se preocupan más de mantener contratados a sus primos, cuñados y asesores de campaña. Total, es plata de todos los chilenos. ¿A usted le parece normal? Al parecer sí, o al menos a los defensores del “amiguismo” sí.
Y ahora me pregunto. ¿Cómo se construye un Estado honesto y serio, si la primera barrera es el apellido o la militancia? ¿Cómo le pedimos compromiso a los chilenos si el mérito queda relegado a un segundo plano?
Esta práctica, además de ser inmoral, es también profundamente ineficiente, porque impide que lleguen los mejores y castiga al que se esfuerza.
No hay mucho análisis que hacer, o se defiende la transparencia y ser honrado, o se defiende el pituto, pero la votación en el Congreso dejó clarísimo de qué lado están los que votaron en contra. Son los mismos que quizás en los próximos años nos llenen de promesas para mejorar el Estado y terminar con los abusos, pero que a la hora de la verdad, mantienen a este feudo de pitutos a plena luz del día.
Y esto no es solo un problema ético, es un problema práctico, que afecta al funcionamiento del Estado. Es la eficacia de los servicios públicos y, lo más importante, es la confianza de millones de chilenos que cada día creen menos en las instituciones. El pituto en la democracia es lo que hace la termita a la madera, la destruye por dentro.
¿Se dieron cuenta de lo que implica? Miles de chilenos que estudian, se capacitan y buscan un trabajo en el sector público verán nuevamente como el cargo, milagrosamente fue asignado al “hermano de”, o a la “pareja de” o al “militante de”. Lo más curioso y preocupante para mí, es que lo hacen sin ninguna vergüenza, mientras repiten discursos grandilocuentes sobre la justicia social e igualdad de oportunidades.
Algunos dirán que no era el momento y que hay cosas más urgentes, pero para la gente honesta que ve cómo dilapidan sus impuestos en sueldos de conocidos y compromisos electorales, la verdad es que todo momento es bueno para erradicar un sistema corrupto y abusivo.
Pero como yo le explico a las nuevas generaciones, jóvenes que se esfuerzan, que estudian para tener un mejor futuro, que sueñan con vivir y servir en un mejor país, que no es necesario ser el mejor para ocupar el mejor cargo. ¿Cómo no indignarse?
Desde el Partido Republicano, no vamos a bajar los brazos. Llevamos años desenmascarando la pitutocracia, que tanto la izquierda como la antigua derecha protegen con uñas y dientes.
Podrán rechazar todos nuestros proyectos, pero cuando lo hagan le estarán dando la espalda a la demanda ciudadana más básica, que el Estado nos sirva a todos, y no solo a los privilegiados de turno.
Lamentablemente hoy ganó el pituto, pero no será por mucho tiempo. Tarde o temprano la gente se cansará de ver como sus recursos se van por el baño del amiguismo, y el día en que se queden sin excusas, quienes defendieron con tanto interés la Ley Antipituto, van a tener que salir a explicarle a Chile, a sus propios votantes, sobre el por qué prefirieron los lazos familiares y los lazos partidistas antes que la meritocracia y el servicio público.
Nota: Este artículo fue publicado originalmente por El Líbero el domingo 6 de abril de 2025.
agustinromerodiputado y diputadosrepublicanos
¿Qué piensa la ANEF cuando ve a estos ineptos? Funcionarios como la abogada de la Segpres que dice que no es su trabajo revisar la constitucionalidad de un decreto…
Esa es la grasa del Estado que queremos que se vaya: ineptos con sueldos millonarios que además opacan e invisibilizan a los buenos funcionarios públicos, que sí trabajan con compromiso y preparación.
#RomeroenelCongreso
https://www.instagram.com/reel/DIM_K8cxUBA/?igsh=dzAwY3JiZW9rcWQy
Para llegar al poder, le dijeron al pueblo que mejorarían su situación económica y el resultado es un secreto a voces: