LA VERDADERA HISTORIA:

LA VERDADERA HISTORIA:
11 de septiembre
Por Rodrigo Ojeda
Tras 52 años del 11 de septiembre de 1973, la historia no comenzó ese día y es un pasado incómodo. Generacionalmente, pocos quedan indiferentes al 11 de septiembre (11S), pero muy pocos lo vivieron. Corresponde al estudio del pasado nutrir la reflexión y evitar la instrumentalización de una época controversial. Guste o no, no hay 11S sin los años, meses y días previos. Fueron tiempos complejos con una democracia desgastada y sobrepasada por la seducción guerrillera, la utopía revolucionaria y la vía insurreccional. Durante la Unidad Popular (UP) la sociedad chilena quedó dividida en trincheras ideológicas e irreconciliables. Además de la “violencia retórica y también física” con distintas responsabilidades por acción, reacción y omisión. “Se habla mucho de la Unidad Popular y yo creo que es un período a revisar. Y desde la izquierda tenemos que ser capaces de analizarlo con mucho mayor detalle y no sólo desde una perspectiva mítica”, en palabras del compañero Boric.
¿Qué ocurrió en Chile? Es la pregunta rectora del expresidente Frei Montalva en su carta a Mariano Rumor del 8 de noviembre de 1973. La respuesta en 23 carillas, es un balance de lo padecido durante los mil días de Allende. Frei “estaba en contra de la Unidad Popular, porque no quería vivir en una sociedad socialista”. Un opositor que alertó la crisis y se opuso a la ideología marxista, política e intelectualmente, en todo momento. En su misiva fue contundente al señalar que “la responsabilidad corresponde a la UP” como gobernantes del país durante los años 1970 a 1973. El expresidente presenció la llegada y el ocaso de la vía chilena al socialismo. Para Frei, la UP “distorsionó todo el proceso de desarrollo político, cultural, económico y social” de Chile. Impuso un diagnóstico dogmático e intentó grandes transformaciones sin los respaldos institucionales, políticos y sociales. Denunció el desprecio declarado por la “democracia y legalidad burguesas”. Esa “democracia burguesa” vilipendiada y una necesidad táctica para la UP y las olvidadas Garantías Constitucionales.
“Los que destruyeron este país ahora se convierten en acusadores y defensores de la democracia, cuando aquí lo único que hicieron fue tratar de aniquilarla”, según el balance de Frei. La izquierda comunicó que la lucha armada y el enfrentamiento eran inevitables. Los grupos armados y el terrorismo fueron reales en “defensa del pueblo”. Sobrepasaron el ordenamiento legal y constitucional. La Guerra Civil fue advertida y propiciada. El gobierno de Allende fue cómplice e inconsistente con los grupos armados. La UP prometió de todo a todos desde el irrealismo. Aumentó las contradicciones sociales e institucionales en un ambiente polarizado. No pudo resolver sus divisiones internas respecto de los medios y ritmos en el proceso revolucionario. Allende quedó atrapado en el Programa y Comité Político de la UP. La marcha al abismo no se detuvo tras la conformación de gabinetes cívico-militares. Los militares fueron llamados por Allende con antelación al 11S. “La política se militarizó y los militares se politizaron”. El diálogo se agotó tras los intentos del Cardenal.
Frei no participó de la planificación ni ejecución de la salida militar, esa salida inevitable que todos vieron venir. El expresidente sintió “una sensación de liberación, pero por otra parte de angustia”. Según Frei, los mil días fueron un drama, una tragedia, un fracaso y una catástrofe. El 11S puso fin al riesgo totalitario y a la delirante actividad política de los mil días. La UP y el 11S, nos incomodan y obligan a preguntarnos qué nos llevó a dividirnos en enemigos al borde de una guerra intestina. Hoy, el presidente Boric conmemora y declara su preocupación por la “erosión y debilitamiento paulatino de la democracia”. En paralelo, expresa ese reciclado: “Democracia siempre” es una frase que suena bien, pero omite los errores de la UP. Debemos aprender de las luces y sombras del pasado, sin apologías a los grupos armados y guerrilleros. La violencia política se condena siempre, antes y después del 11 de septiembre.
Nota: Este artículo fue publicado originalmente por El Pingüino el domingo 14 de septiembre de 2025.