Clamor



Clamor

Don Luis Cordero, en su columna del 18 de febrero, hace un apretado recuento de los comentarios expresados por algunos ex comandantes en jefe y ex director general de Carabineros. Probablemente por el esfuerzo de síntesis, se le escapa lo esencial del clamor de aquellos: que los juicios por derechos humanos se ajusten a un debido proceso. Eso hoy no ocurre puesto que —únicamente por la fecha de los ilícitos investigados— los militares son sometidos al antiguo sistema procesal, suspendido en Chile hace más de 15 años, precisamente, por arbitrario.

Por otra parte la eternización de los juicios no se debe a la “limitada o nula colaboración de las instituciones armadas”, sino a la complejidad de recabar información de hace 40 a 45 años, en un país que se estaba levantando del caos político, social y económico, donde se había validado la violencia como arma política. En ese periodo se concentra la inmensa mayoría de los casos por derechos humanos. Con todo, aun si existiera un “pacto de silencio”, no sería ético intentar quebrarlo condenando a inocentes con febles “pruebas”, ni menos con ficciones jurídicas que hieren la razón.

Miguel A. Vergara Villalobos