Justicia y clemencia



Justicia y clemencia

No hay justicia cuando se condena a un imputado:

a) Sin estar debidamente acreditado el delito y existiendo dudas razonables de que realmente hubiere cometido el hecho punible objeto de la acusación y que en él le hubiere correspondido una participación culpable;

b) Sin respetar los derechos humanos a la presunción de inocencia y a un debido proceso;

c) Vulnerando leyes expresas y vigentes;

d) Violando garantías constitucionales, tales como los principios de legalidad y de igualdad ante la ley;

e) Que cumplía órdenes que no podía desobedecer;

f) Que era muy joven en la época en que ocurrieron los hechos y habiéndose cumplido con creces los plazos de prescripción de la acción penal (justicia tardía no es justicia);

g) Por hechos reprochables cometidos por motivaciones políticas durante una época de enorme convulsión social y que en una situación de normalidad no habrían ocurrido;

h) Aplicando retroactivamente normas legales o de tratados internacionales;

i) Aplicando convenios internacionales que no han sido ratificados por Chile;

j) Que es inocente del delito que le fue imputado o que está libre de culpa o exento de responsabilidad criminal;

k) Que no constituye un peligro para la sociedad y que no tiene posibilidad alguna de reincidir.

Se ignora la clemencia cuando se les niegan beneficios humanitarios a personas aquejadas por enfermedades graves o de edad muy avanzada o que tienen un menoscabo físico o mental irrecuperable que les provoca una dependencia severa; y que durante más de cuarenta años han mantenido una conducta intachable.

Adolfo Paúl Latorre, Abogado.