Obediencia reflexiva

Obediencia reflexiva
El ex ministro Jaime Ravinet y el señor Jaime Couso, profesor de Derecho Penal, a través del diario El Mercurio de Santiago, han intercambiado reiteradamente sus respectivas posturas respecto a la “obediencia reflexiva” de los militares.
Tuve el honor de ser oficial de Ejército por más de 30 años, la mayoría de los cuales los dediqué a la docencia y formación de oficiales, suboficiales y de Estado Mayor, razón por la que creo conocer en profundidad la esencia de la carrera militar y la peculiaridad que presenta formar a personas que estarían dispuestas a entregar sus vidas para salvaguardar los superiores intereses del país.
Tal como cientos de camaradas de armas, el año 1973, siendo un joven subteniente recién egresado de la Escuela Militar, me correspondió ser testigo y partícipe de la peor crisis que registra la historia patria en el siglo XX. En ese contexto, entre muchas otras misiones que no busqué, sin estar preparado y ajeno a mi voluntad, ya que se apartaban del quehacer normal institucional, debí cumplir la orden de conducir un vehículo para trasladar a dos detenidos desde el interior del regimiento hasta la Cárcel Pública de San Felipe, quienes luego desembarcar del vehículo, resultaron muertos en extrañas circunstancias, las que nunca se podrán aclarar completamente ya que los participantes directos están fallecidos hace años.
Encuentro interesantísima esta discusión legal, la que también debiera abordarse, entre otras materias, desde el punto de vista filosófico, ético y de las especificidades de la profesión militar. Sin embargo, mientras no nos pongamos de acuerdo sobre la “obediencia militar”, estimo que es un deber de las actuales autoridades competentes, exigir a los Tribunales de Justicia el cumplimiento de la letra y espíritu de la Constitución y las leyes vigentes. Lo demás es venganza, prevaricación y un lucrativo negocio.
Sergio Jara Arancibia