El general Schneider en 1970

El general René Schneider Chereau expresó en diversas ocasiones su idea acerca del papel que le corresponde desempeñar a las FF.AA. como garantes del orden institucional de la República. Por ejemplo, en la entrevista concedida al diario El Mercurio el 8 de mayo de 1970 manifestó: “El Ejército va a garantizar el veredicto constitucional”.

Tales palabras fueron utilizadas por la izquierda para distorsionar el pensamiento del General, pues ésta veía en las FF.AA. el único escollo para sus propósitos de conducir a Chile hacia una tiranía marxista. Así fue como se configuró lo que se dio en llamar “doctrina Schneider”.

Sin embargo, en esa “doctrina” se omitió un aspecto esencial de su pensamiento y del cual quedó constancia en actas de dos consejos de generales (23.7 y 7.9): “Es conveniente, sin embargo, dejar claramente expresado el hecho de que esta posición y este pensamiento eminentemente legalista tiene como única limitación el hecho de que el Poder del Estado que se está sustentando y respaldando abandonara su propia posición legal; en este caso, naturalmente, las Fuerzas Armadas que se deben a la nación, que es lo permanente, más que al Estado, que es lo temporal, quedan en libertad para resolver el problema”; “Ahí sí, que ante cualquier situación anormal, desde el punto de vista legal, que se produzca, la Institución deberá actuar decididamente, ya que esa es nuestra obligación, incluso por la fuerza, sin términos medios de ninguna especie”.

De estos planteamientos del general Schneider puede apreciarse claramente que, como parte de su doctrina, está la intervención militar frente a situaciones de absoluta anormalidad. La actitud de neutralidad y de prescindencia de las FF.AA. en materias de política contingente es lo normal y lo deseable. Sin embargo, cuando por incompetencia de la clase política se ponen en peligro intereses vitales de la patria las FF.AA. están obligadas a actuar, puesto que ellas constituyen la garantía última del orden institucional de la República, cuando han fallado todos los demás mecanismos constitucionales.

Adolfo Paúl Latorre, Abogado