¿Justicia???



¿Justicia???

Hoy, martes 15 de febrero, del 2022, leí el reportaje que hace El Mercurio sobre el caso del general Oscar Izurieta, que se suma a lo ya planteado contra los generales Juan Miguel Fuente-Alba y el general Humberto Oviedo. Seguramente saldrá información similar en otros medios menos importantes. Escribe la periodista Cynthia Carvajal, quien dedica el 90% del espacio del artículo a inculpar al general Izurieta por el uso de casi 4.000 millones de pesos en su período como Comandante el Jefe del Ejército (CJE) y hasta en 6.500 millones después. Lo acusa de usar esos algunos de esos fondos incluso en cosas como convidar a sus mujeres en algunos viajes o regalos a subalternos, cuando en realidad, el general Oscar Izurieta, con su compra de los Leopard 2A4, los Marder, los cañones autopropulsados M 109, los misiles anti-tanque Spike y otras cosas por el estilo, produjo la mas grande modernización del Ejército en un siglo, ahorrando al país una fortuna en equipamiento, que el consiguió a precios irrisorios, ahorrándole al país montos que hubieran bordeado unos 2.000 millones de dólares, si es que los 140 tanques, los 200 Marder, los 48 cañones autopropulsados M 109 e infinidad de otros sistemas de gran importancia, como los misiles antitanque israelíes Spike, que por si mismos, cambiaron la ecuación estratégica en el norte de Chile, por primera vez desde la guerra del Pacífico.

Nada de esto se dice, nada se recuerda de su extraordinaria gestión, incluyendo sus enormes esfuerzos para que todos estos sistemas se logren mantener en el tiempo, asegurando su mantenimiento y modernizaciones futuras, sin sufrir la crisis que tuvieron los 204 tanques Leopard 1V comprados pocos años antes, que por incapacidad de mantenimiento, gran parte de ellos se tuvieron que dar de baja. El general Izurieta programó recuperar parte de esos tanque, trasladarlos a Magallanes en reemplazo de los AMX 30 y vender otros que no se pudieran recuperar bien, por falta de presupuesto para ello. En general, su gestión fue extraordinaria, ejemplar para Chile y para su Ejército.

Involucrarlo en minucias, como son los miles de gastos diarios que requiere una comandancia en jefe tan activa como la de él, para lo cual los gastos reservados están destinados, me parece una falta de criterio y una muy mala intención. Sin duda parte de la campaña de desprestigio.

Otra cosa es que se hubiera implementado una formila nueva, más moderna, de control de estos gastos, cosa que también se puede hacer. Pero es sabido que cuando un jefe ejecutivo debe moverse rápido en cosas fundamentales, no tiene tiempo ni espacio para dedicarle tanto a revisar detalles (como mantener la casa del CJE, organizar decenas de cocteles protocolares que son carísimos, mantener el aseo o el jardín, pagar a los ordenanzas o choferes, etc, o que su mujer lo acompañara alguna vez, en alguno de los viajes, lo que me parece humano y lógico en el nivel de un CJE).

Todo esto tiene una enorme mala intención. Se esta involucrando a oficiales superiores muy distinguidos para enlodarlos y, con ellos, enlodar y desprestigiar a las mejores instituciones de Chile. Es otra parte de la destrucción del país que ahora esta en marcha.

Daniel Prieto