Llama la atención que ya prácticamente nadie discute que se deben aumentar los impuestos. La eficiencia del gasto público no es tema para nadie. Debemos, los que hemos trabajado duro todo una vida, financiar a un estado y a un gobierno de ineptos. Hemos perdido un año con 155 constituyentes y centenas de asesores, escribiendo un mamarracho, pero que igual ha costado cifras siderales.

Estamos financiando todos los beneficios a inmigrantes ilegales y a originarios falsos, que milagrosamente pasaron a representar más del 12% de la población total, cuando hace 2 censos eran la mitad o menos. Estamos financiando nuevos organismos del estado que no han aportado nada a la paz en Chile, como el INDH que es un nido de activistas.

Estamos financiando el aporte del estado a proyectos culturales que promueven el marxismo y también a todo el aparataje de la oficina de la Irina que es la “pareja actual” de Boric. Estamos financiando con aportes del estado a nefastos organismos como la CEPAL, entidad cercana de las dictaduras de Cuba y Venezuela.

Ya nadie recuerda que seguimos financiando a los familiares de exonerados falsos, con la complicidad de los parlamentarios de derecha que no denuncian y no mantienen vivo el tema.

Se aumentaron las contribuciones a propiedades agrícolas, y simultáneamente se usurpan los derechos de agua, con lo que los predios perderán valor y se afectará la viabilidad de la agricultura.

El gobierno lleva adelante una serie de propuestas que implican nuevos organismos y más funcionarios. Se aumenta el aporte patronal y se disminuye la jornada laboral a cambio de nada. Cualquier persona con alguna experiencia empresarial y con una inteligencia mediana, podrá concluir que vamos retrocediendo y que lógicamente los inversionistas buscarán otros lugares del mundo para invertir.

El gobierno argumenta que el dólar sube por alza de tasa en USA y por caída de precio del cobre, pero no dice que la razón más de fondo es la caída en la expectativas por el gobierno que asumió. El caso de Codelco Ventanas sólo evitará la huelga de los sindicatos pagándoles millonarias indemnizaciones y entregando todo tipo de beneficios, con plata de todos los chilenos.

Finalmente la compra de tierras es otra mala medida que tendrá altos costos para el erario nacional y no conseguirán nada bueno para la Araucania o para Chile. La entrega de tierras a comunidades es la peor decisión posible pues ellos no lograrán rentabilizar “sus” campos y terminarán abandonados, como lo están la mayoría de los predios ya asignados.Si está de acuerdo por favor difúndalo.

¿Y hasta cuándo parlamentarios sinvergüenzas?

No se nos ha olvidado la contratación irregular de su esposa ni cuando chocó y se dió a la fuga.