JOSÉ MIGUEL INSULZA: LA FORMA INMENSA EN LA QUE CRECIÓ CHILE
JOSÉ MIGUEL INSULZA: LA FORMA INMENSA EN LA QUE CRECIÓ CHILE
Interrogado el senador Insulza (PS) acerca de los resultados de la elección primaria que concluyó con la derrota de Paula Narváez, candidata del PS/PPD, manifestó que, por cierto, lo lamentaba y agregó que ese resultado y la débil posición en que se encuentra su partido se debe a que: “Hemos sido incapaces de defender la forma inmensa en la que creció este país en los últimos 30 años”*.
Eso es cierto, pero ¿por qué no han sabido defenderla? Simplemente porque han desconocido la raíz de este crecimiento y, más aún, la han atacado. De hecho, el país no ha crecido sólo en los últimos treinta años, sino en los últimos 45, porque la base de este crecimiento lo puso el gobierno militar cuando dió término a la política estatista y socialista que había caracterizado a Chile desde 1930 en adelante y la reemplazó por una pujante economía social de mercado. El país, por cierto, se demoró en arrancar y los frutos comenzaron a cosecharse en una gran dimensión después de 1990, cuando el gobierno militar ya había llegado a su término. Los gobiernos de la Concertación: Aylwin, Frei, Lagos y Bachelet se “encontraron” con este modelo de política y tuvieron el buen tino de continuar con ella.
Pero, a la vez, tuvieron la mezquindad de no reconocer su origen. Al contrario, se dedicaron con todo a desprestigiar a ese gobierno, con lo cual cayeron en una flagrante contradicción que es la que ahora les pasa la cuenta. Se hicieron eco durante esos mismos treinta años de la acusación de fomentar la “desigualdad” que se imputó a ese modelo y, al final, fueron cazados en la trampa que tanto habían colaborado a armar. “Tanto va el cántaro al agua que, al final, se rompe”. Eso fue lo que sucedió con la prédica de la desigualdad que terminó por quebrar, en la mente de los chilenos, la realidad del inmenso crecimiento. Y ahora ¿Qué sucede? Sucede que los que crecieron al alero de la crítica al gobierno militar, el Frente Amplio, por ejemplo, las emprenden contra el “modelo” y contra quienes lo sostuvieron y aplicaron, entre otros Insulza y el PS. Ellos, ahora, padecen em carne propia el viejo aforismo: “Cría cuervos y te sacarán los ojos”.
Por lo menos, reconozcamos a Insulsa la valentía que demuestra ahora al reconocer el crecimiento inmenso que ha tenido Chile. Pero no caigamos en el egoísmo en que cayeron él y su partido en negar la verdad histórica acerca del origen de ese crecimiento. Reconocer ese origen en el período militar es, sin duda, un factor de la estabilidad y de la paz en Chile que tanto echamos de menos y será, sin duda, el motor que necesitamos para volver a crecer como sucedió en esos años.