LA RANA Y EL ESCORPION



LA RANA Y EL ESCORPION

Fábula siempre de actualidad

                                                                                                        Por  Humberto Julio Reyes

            Días atrás he leído en las cartas al director de El Mercurio una que narra la experiencia de una joven liceana al inicio de los funestos 1000 días de la Unidad Popular.

            Motivada por recientes demostraciones de intolerancia, en ella se refiere a la forma en que los comunistas intentaban acallar toda opinión opositora de parte de los apoderados, versión antigua de las modernas funas, como la sufrida últimamente por don Sergio Micco.

            Quien rememora esta triste experiencia ocupó, entre otros, el cargo de ministro de Defensa durante la Concertación y, aunque miembro del PPD, también la presumo cercana a la DC y, por ello, persona que sabe de política y de partidos.

            Ella recurre a la conocida fábula para recordarnos que el partido comunista, desde siempre, ha actuado como el escorpión del cuento respecto a la rana, que sería nuestra sufrida democracia.

            Más allá de lo anecdótico, la lectura de la carta en cuestión me ha motivado a un par de reflexiones.

            La primera y más evidente: vaya novedad.

            La segunda: ¿y no ha sido acaso durante los últimos años la rana democristiana la que ha transportado sobre su lomo al escorpión comunista, permitiéndole disfrutar de su actual representación parlamentaria que le ha permitido ejercer una importante cuota de poder en el gobierno?

            ¿Recuerdan los diversos pactos, para no competir y facilitarle el camino al partido que se propone enterrar la democracia tal como la conocemos, al igual como hace años Kruschev amenazó a occidente?

            ¡Y ya han acordado un pacto para las próximas elecciones municipales!

            Y, por supuesto, después de maduras deliberaciones se ha sumado con entusiasmo al En contra, sin siquiera cotizar la prudente opinión de su única representante en el reciente proceso.

            ¿Es que esta rana no aprende de la experiencia o su apetito la lleva a arriesgar su ya comprometida supervivencia?

            Y pensar que hace años fue el más importante partido de centro, hasta que los cercanos a la izquierda lo fracturaron y terminaron finamente por inclinarlo a una izquierda de la cual nunca ha podido liberarse y que sigue imponiéndose en su conducción, como ha quedado en evidencia en todo este largo proceso constitucional.

            ¿Sobrevivirá a la prueba del 17 de diciembre?

13 de nov. de 23