Presidente de la Corte Suprema y la paradoja de exhortar a los nuevos abogados a ser más humanos con las personas

Como una paradoja o contrasentido califica la Multigremial Nacional del Personal en Retiro de las Fuerzas Armadas, Carabineros y PDI de Chile, el llamado realizado hace unos días por el Presidente de la Corte Suprema a los nuevos abogados para que humanicen el ejercicio de su profesión, puesto que la arenga suprema debió estar dirigida a los actuales jueces que sustancian causas de DDHH, quienes a través de sus fallos reflejan precisamente lo contrario: una falta de humanidad. 

Explicó el presidente de la Multigremial FACIR, Pedro Veas Diabuno, que en causas DDHH relacionadas a los militares son cientos de ejemplos de falta de humanidad en la aplicación de Justicia. “El Ministro de Corte Jaime Arancibia, es un ícono de la falta de humanidad al decretar la detención del General Héctor Orozco de 90 años a espaldas de la solicitud de la abogada de ser ella notificada de la sentencia, tras presentar su defendido demencia senil, y dictar luego su detención por parte de la PDI siendo trasladado en pijama y bata hasta el Penal de Punta Peuco ¿A esta clase de humanidad se refiere el Presidente de la Corte Suprema al exhortar a los jóvenes abogados?”.

El Ministro Mario Carroza es también otro ejemplo de falta de humanidad – afirmó de forma tajante el presidente de la Multigremial- ya que condenó al coronel Julio Castañer a 10 años de cárcel, sin siquiera haberlo interrogado ni tampoco leerle la sentencia mirándolo a la cara. ¿Esta es la humanidad que el Presidente de la Corte Suprema quiere que profesen los nuevos abogados? Y ¿qué pasa con quienes están ya impartiendo justicia en sus distintos niveles?

Si las palabras del Presidente de la Corte Suprema no son sólo dichos de buena crianza o porque había que innovar en el discurso de la Ceremonia de juramento de los nuevos abogados, entonces, no tendrá dificultades –explicó Pedro Veas Diabuno- con exhortar a los jueces extraordinarios que llevan causas de DDHH de humanizar –aquí y ahora-  la aplicación de justicia y de colocar en el centro a la persona, de manera de no ver más acciones, decisiones y resoluciones judiciales que riñan ferozmente con la falta de humanidad, la justicia, el respeto y la dignidad humana

Santiago, 21 de agosto delo 2019