¿Se derechiza la derecha?



¿Se derechiza la derecha?

Por Luis Larraín Arroyo

Una diputada de RN se declara pinochetista, políticos chilenos se muestran junto a Bolsonaro, José Antonio Kast está cada vez más presente en la discusión, el gobierno no adhiere al Pacto Migratorio de la ONU. ¿Son hechos demostrativos de una derecha que se ha ido más a la derecha en sus posiciones?

No necesariamente. Primero, una precisión geométrica o geográfica si quieren. ¿Se han fijado que los de Puerto Montt hablan del norte para referirse a Temuco? Pues la gente de izquierda habla hoy de ultraderecha para referirse a la derecha. ¿No será que la izquierda chilena se ha polarizado y está viendo a la derecha cada vez más “al norte”? Porque después de la derrota en las elecciones presidenciales su movimiento ha sido hacia la izquierda, desafiando la lógica cartesiana. Si el electorado está a tu derecha, no debes moverte hacia la izquierda para seducirlo; y claro, si lo haces, desde allá todo se ve más a la derecha.

Lo que sí ha ocurrido, y este es un fenómeno global, es que hoy hay una derecha más consciente de sí misma, más confiada, más dispuesta a manifestar su opinión. Como ha sido señalado por varios, la izquierda ha perdido en los últimos años conexión con las demandas de la gente. Como dice Mark Lilla, siguiendo políticas identitarias e intentando representar minorías y sumar sus apoyos, lo que ha hecho la izquierda es alejarse del hombre común. Así lo indican las encuestas y los resultados electorales en diversos países. El progresismo, la obsesión por un lenguaje políticamente correcto, tiene cansados a muchos. El intento de establecer una “policía del pensamiento” que nos señala los límites de lo que es posible decir u opinar ha llevado a mucha gente a rebelarse y movilizarse votando por partidos de derecha que captan mejor su sentido común. Esto es patente en temas como las migraciones. La mayoría, incluyendo los inmigrantes, quiere que exista una migración ordenada, regulada, que no tensione a los países receptores, sino que permita ir acogiendo a los extranjeros que desean radicarse en otro país de una manera armónica. Pues bien, si manifiestas esa opinión te dicen que eres xenófobo, racista, fascista, primitivo, básico. La gente se cansó de eso.

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