Por Cristián Labbé Galilea

El presidente Boric ha reiterado que sería un fracaso que la propuesta de una nueva Constitución sea rechazada en el plebiscito del 12 de julio, que, por lo mismo le brindará todo su apoyo, y que espera, además, se cumplan los plazos otorgados a la Convención (4 de julio) …. ¡Muy a la chilena!… “Se aprueba o se aprueba, ya veremos cómo se arregla”.
Por delirante y apocalíptico que parezca, tiene algo de lógica: es la perspectiva de un gobierno que asume con morrocotudas debilidades e inseguridades, al que una “derrota temprana” le echaría por tierra la imagen de “rock star” y “púber mesías” de su titular, colocando a su administración en un difícil brete… ¡No le queda otra que ganar el plebiscito… antes que siga su desgaste!
Todo esto mientras la oposición da señales inequívocas de una división, en forma y fondo, que parece no ser fácil de superar, por lo que poco se puede esperar de ella en estos difíciles momentos, obligando a que cada parroquiano, por sí solo, haga su trabajo… como pueda.
Dadas estas circunstancias, lo mas probable es que la izquierda más radical, ahora en el gobierno, con su conocida maestría comunicacional llevará la situación a una coyuntura estrictamente emocional, buscando que… ¡la razón ceda ante la emoción…!
Por aberrante que sea lo aprobado por los constituyentes en el plenario, que forma parte del “Borrador” de la Constitución, los esfuerzos del gobierno y su maquinaria publicitaria (y logística) se concentrarán en transmitir un mensaje “emocional”… ¡Hay que liquidar la Constitución de Pinochet!
Ante esa amenaza la estrategia debe ser… ¡Rechazar… y no más plazo a la Constituyente! Al gobierno hay que infligirle una “derrota temprana”, antes que alcance a desplegar su poder en los cargos y posiciones desde donde emplear “su artillería comunicacional”.

Es necesario avivar en la comunidad la “duda razonable”, que sea simple, clara, corta, directa, pero básicamente emocional… como:
​Rechazo… el aborto libre
​Rechazo… el Estado Plurinacional
​Rechazo… la eliminación del Congreso
​Rechazo… el país dividido en regiones y territorios autónomos
​Rechazo… la Justicia indigenista y paralela
​Rechazo… no poder intervenir en la educación de mis hijos…

Hay que neutralizar lo dicho peyorativamente por el Presidente Boric: … “cualquier resultado será mejor que una Constitución escrita por cuatro generales”.

No hay que confundirse… quienes redactaron la Constitución del 80 fueron: la Comisión Ortuzar; el Consejo de Estado (presidido por el expresidente Alessandri); aprobada en dos plebiscitos y ratificada en varias oportunidades (incluso por el Presidente Lagos).

Por último, hay que decirlo con claridad… es cierto que quienes encargaron su redacción fueron “cuatro generales”, claro que sí… pero eran quienes comandaban las FF.AA y dirigían los destinos del país a petición de la ciudadanía… muy distinto a lo dicho por el Presidente y a lo que está realizando la Convención, actitudes que parecieran estar más dedicadas a convocar a los “cuatro jinetes de la Apocalipsis”… (guerra, peste, hambre y muerte) que a construir la “casa de todos”.