POPURRI NEFASTO



POPURRI NEFASTO

Semanas de Infierno

  1. El mega-incendio y el festival 

           Aun no se apagaban las cenizas del mega-incendio que azoló a la región de Valparaíso y se discutía acerca de la necesidad de realizar el fastuoso festival de Viña del Mar, y el controvertido cantante mexicano de música urbana, Peso Pluma, a causa de que sus canciones constituyen una apología a los narcos, desistía por si solo después de un escándalo con su pareja y haber sido acusado de robar mariguana en una tienda de USA, echando por tierra las tesis y defensas corporativas para desistir de su contrato. En definitiva el festival se llevó a efecto bajo la promesa que parte de sus utilidades irían a favor de las miles de familia damnificadas, pese a la abierta oposición que existía al respecto. Pero hasta el momento nada se ha dicho en relación a la prometida ayuda económica y las entradas enviadas a damnificados que constituyeron una verdadera ofensa. Sin embargo, la alcaldesa Ripamonti, la misma que abrió una millonaria exposición para conmemorar el estallido delincuencial, no halló nada mejor que cuando se anunciaba su presencia mostrar un letrero que decía “Ley de Incendios Ahora”, tratando de justificar la escasa ayuda denunciada por los afectados y tratando de exculparse por la negligencia de no haber cumplido previamente con la exigencias de SERNAPREV y presentar además un Plan basado en copy-paste. Toribio no opina sobre el festival, porque no lo ve, salvo en esta oportunidad en que se anunció la participación de Andrea Bocelli, que constituyó un éxito extraordinario e inesperado por el tipo de público, demostrando que cuando al pueblo se le entrega cultura, sabe apreciarla. Pero en nuestro Chile, los patrocinadores de la cultura popular, solo piensan en el rating y desprecian enriquecerla. En el pasado quedaron programas como los de Cristián Warnken y de música clásica entre muchos otros; gracias a la UC aún se sostiene radio Beethoven; ni siquiera el canal que financiamos todos los chilenos  hace algo por el estilo. Así como hay “Teatro a Mil” podría existir “Música a Mil” pero no de la urbana.

          Con respecto a las ayudas prometidas, los damnificados siguen apelando a ellas y algunos critican que solo han recibido por parte de sus propios vecinos y donaciones de particulares. El gobierno había asegurado alrededor de 400 viviendas de emergencias por semana, meta que al parecer no se ha cumplido. Todo parece indicar ─desgraciadamente─ que los incendios tal como el terrorismo en la mega-zona del sur vinieron a quedarse, la necesidad de contar con stock previos es imprescindible, lo que además podrán utilizarse ante los estragos causados por las lluvias que también forman parte de nuestro currículo patrimonial, pero que ello no quede en manos de los alcaldes por la malograda experiencia obtenida hasta la fecha.

                Toribio no es mal pensado, pero sería bueno que alguien transparentara la ayuda recolectada para estos fines y su distribución, como por ejemplo los $300 millones del Festival de Viña ─que es una miseria─; los más de $6.500 millones de “Juntos Levantemos Chile”; lo ofrecido por el jurado del festival, que se desconoce; como asimismo el remate de las especies donadas por los artistas y la guitarra de los Bunkers

  1. Las tomas de terreno.      

    Por lo general son consideradas como formas de demanda y acceso a la vivienda de las familias sin casas, y que han consistido en la ocupación de terrenos o viviendas ajenas, ya sea de índole particular o fiscal a lo largo del territorio. Lo que guarda estricta relación con la coyuntura económica que ha vivido el país y orientada al derecho a la vivienda presiona al Estado para su logro, cuando este es insuficiente o incapaz de satisfacer las demandas, constituyendo una verdadera movilización social. Este hecho que es de larga data, sin embargo ha sufrido un aumento considerable en las últimas décadas, lo que no solamente ha obedecido a la coyuntura económica antes indicad. Según el parecer de Toribio -y como lo muestran los hechos- producto de la inmigración ilegal y descontrolada a partir de los gobiernos de Bachelet y Piñera, lo que podemos aseverar por las evidencias constatadas, dichos actos en la actualidad están siendo fuertemente incrementados por extranjeros, en su mayoría ilegales, a tal punto que algunas tomas de terreno se identifican con los nombres de los países de procedencia.

       Según un informe del Minvu de marzo de 2021, existiría 418 nuevas tomas –respecto del catastro de 2019– que albergarían aproximadamente 26.476 viviendas. Desconocemos en consecuencia su proyección hasta la fecha, teniendo en consideración el aumento extraordinario de la migración ilegal pese a las medidas adoptadas, que son insuficientes ante el paraguas legal que la ampara, contando además con el Servicio Jesuita de Migrantes, financiado en parte por el Estado, que es proclive a dicha inmigración. Según este informe la toma de terrenos han aumentado un 53%, siendo las regiones más afectadas, Valparaíso, Metropolitana y Bío Bío.

     Lo más grave es el carácter que ha adquirido esta toma, pues se han desarrollado como mini ciudades o barrios con el dominio de delincuentes que ejercen toda clase de actividades ilegales, como casinos, discotecas, bares, prostitución, el tráfico y consumos de drogas, casas de torturas, etc.

       La erradicación y solución demandará muchos años, pero hay que dar señales fuertes e iniciarlas ya, comenzando con una intervención policial masiva que logre sanar la toma de delincuentes, someterlos a la justicia o expulsándolos. Por otra parte, el Estado deberá expropiar los terrenos particulares que se encuentran en abandono o carentes de algún proyecto de inversión; disponer de los predios fiscales disponibles, urbanizarlos con agua y luz y asignar títulos de dominio conforme a las políticas del ministerio de Viviendas. Pero como con plata se compran huevos, mientras el país siga en manos de quienes nos gobiernan o similares, con parlamentarios que solo velan por sus intereses partidistas ajenos a la realidad que vive la población y un poder judicial corrupto e ideologizado, estamos sonados. Pero depende solo de nosotros hacer los cambios. “Guagua que no llora no mama”.

  1. Otra vez el aborto libre.

        No era necesario consultar el oráculo de Delfos para saber que una vez que en Francia se aprobara el aborto libre, en Chile, las chicas de pañuelo verde al cuello se subirían al corro, lo mismo que sus seguidores en el Congreso y hasta el propio mandatario agarrara la guaripola, ya que era parte de su programa de Gobierno. Pero parece que los cristianos y todos aquellos que creemos en el derecho a la vida del que está por nacer nos da temor alzar la voz. Para que esperar que haya parlamentarios de la derecha o del centro político lo hagan, por lo menos no se les ha escuchado hasta la fecha, como asimismo, espero que lo haga pronto el arzobispo de Santiago, quien parece ser más interesado que el anterior en la defensa pública de los valores cristianos.

          Toribio,  tan pronto escuchó la noticia expresó su malestar por X, pero sabiendo que tiene escaso seguidores, trae a la memoria parte de un blog que publicara hace un par de años al momento de que la Convención lo aprobara celebrando presas de histerismo con besos y abrazos este crimen deleznable, que sin embargo, paradojalmente la marea usa el color verde, que significa esperanza, optimismo y vida.

        Quienes abogan por este asesinato parecen desconocer que en el ser humano el corazón comienza a formarse a la quinta semana y a la sexta comienza a latir, de manera que el que está por nacer no es un alienígena. En otra columna esta pluma narró la experiencia de Amparo Medina, del movimiento Pro Vida, ex-guerrillera del ELN de Ecuador, que se hizo partícipe de este grupo después de ser consultora, de un Programa de la ONU de Salud Sexual Reproductivo, para trabajar en el tema del aborto, la exclusión de los padres en la decisión en función de los derechos del cuerpo del niño, el uso y la distribución del anticonceptivo, etc. Su cambio radical, siendo atea, se debió a que producto de una infidelidad matrimonial de una amiga que quedó embarazada, le pidió que la acompañara y estuviera presente durante el aborto. Lo que narró en el video realmente es atroz: El cuchareo constante a que era sometida y ver que lo que extraían no eran coágulos o células que caían en un depósito como pecera, sino partes de brazos y piernas, trozos de piel, sangre humana, etc., las que con posterioridad fueron chequeadas por el médico para comprobar que no faltaba nada, cogidas y botadas en el servicio higiénico. ¡Mujeres de Chile, niñas, jóvenes! No den lugar al nivel de carnicería a que se llegaría mediante este crimen sin ningún tipo de limitación.

  1. El affaire del ex militar venezolano

 

      Hasta la fecha no sabemos la duración de esta terrible serie. Debemos dar las gracias a algunos medios independientes como Radio Bío Bío que nos está ilustrando al respecto, pues amparado en el secreto de las investigaciones ─lo que hasta cierto punto es comprensible─ solo nos quedamos con la casi nula información oficial al respecto, lo que da a lugar a especulaciones o a noticias falsas, que hace aún más turbio este crimen para quien nuestro Gobierno otorgó refugio político en concordancia con nuestro himno nacional “O el Asilo contra la opresión”

        A pesar de la defensa a ultranza que hace el Partido Comunista sobre el tinte político, negando la posible participación de los esbirros de Maduro, la cosa cada día está más caliente, caliente. Toribio en un blog anterior planteó en una de las posibilidades que si no se lograba que fuera sacado del país, seguramente aparecería enterrado en el Cerro Chuño, Arica, donde tiene sentado su reino el Tren de Aragua y que ojalá fuese encontrado entero. No fue Arica, pero si en una toma con mayor presencia de haitianos y venezolanos en la comuna de Maipú. Ratifica esta tesis las afirmaciones hechas por los familiares del exteniente Ojeda en sus funerales ─que dicho sea de paso, fue financiada por connacionales que trabajan en una funeraria y por la propia entidad, ante el silencio del gobierno por la demanda de ayuda, y el propio Boric esperó largos días antes de referirse al tema, pero en menos de lo que canta un gallo, salió en defensa de sus patrones, el PC─ de que sin duda el secuestro y asesinato fue obra del gobierno de Maduro.

            Los hechos evidentes que se han conocido pese a la nula información del ministerio del Interior al respecto, parece confirmar esta tesis por una serie de indicaciones que la avalan. En primer lugar, se trataría de plan muy bien organizado en cuya participación estarían involucrado un número no inferior a 15 personas, considerando los cinco que vestían uniformes simulando ser de la PDI y que efectuaron el secuestro, los conductores y acompañantes de los vehículos que participaron de la operación, protegiendo el exterior del domicilio y su posterior traslado hasta una casa en San Bernardo, donde habrían sido cubiertos con frazadas para proteger sus identidades ─es lo que afirma la investigación de la emisora antes señalada─.

       Tampoco se descarta el apoyo de chilenos en la reunión de información previa, tales como el domicilio actual de Ojeda; el día y hora en que se realizó. Su desempeño nocturno en una empresa de seguridad tenía un régimen de 4×4, días de trabajo y de descanso, y el secuestro se efectuó en el primer día de ese descanso; el edificio tenía dos conserjes y uno de ellos desapareció aproximadamente entre las 02.30 y las 04.00 de la madrugada. Hay constancia que en uno de los automóviles que esperaban estaría el sujeto que dice ser menor edad y llamarse Ángel C ─sin documentación oficial que lo compruebe─ acompañado de Maiquel Villegas Rodríguez, vinculado con la banda de Los Piratas, encargada de secuestros, extorsiones y asesinatos, quien habría fotografiado a Ojeda cuando le fuere presentado por los secuestradores. ¿Con qué objeto? Seguramente una prueba para quienes habrían ordenado el asesinato. Otro personaje sobre el cual existe orden de detención es Walter Rodríguez P., uno de los presuntos asesinos de Ojeda, relacionado con el Tren de Aragua y que trabajó con un ex ministro y vicepresidente Venezolano, Tareck El Aissami. Ahora, cómo es posible que nadie haya visto en la toma el entierro y la fabricación de la loza con que fue cubierto y no haya ningún detenido.

            Caliente, caliente. Está quemando. No olvidemos que Maduro no hace mucho expresó en un video que ya estaban sus soldados en Chile; como tampoco una de sus obsesiones, que era convertir a Chile en un país miserable, más pobre y en una colonia de Venezuela, abriendo las cárceles y soltando a delincuentes para que viniesen a nuestro país, en una clara respuesta al episodio de Cúcuta por el malogrado Sebastián Piñera (Q.E.P.D.)

            No ayuda a lo anterior las versiones de lo que el comandante en jefe del ejército habría informado en la reunión del Consejo de Seguridad Nacional, sobre la presencia de extranjeros en Chile. Hay publicaciones sin sustento que serían 45.000 venezolanos y 25.000 cubanos, además de 9.000 iraníes. Y como se desconocen las actas de dicha reunión, da lugar a todo este tipo de especulaciones, que son nefastas y causan desorientación en la población. Nos queda la tranquilidad que dicha autoridad de tener antecedentes los habría entregado en forma fidedigna y son otros los organismos encargados de darlos a conocer. ¿Habrá que esperar las investigaciones de la radio Bío Bío?

FERNAND HORMAZABAL DIAZ

General de Brigada (R)